A pesar de experimentar un grave caso de FOMO cuando Legend of Zelda Tears of the Kingdom salió a la venta el año pasado, me tomé mi tiempo para jugarlo. A pesar de lo mucho que disfruté con Breath of the Wild, no me atrevía a adentrarme en la nueva aventura de Link en Hyrule por una sencilla razón: creía que no se me daría bien. No soy el mejor a la hora de resolver puzles, sobre todo cuando dichos puzles requieren que construya cosas. Tampoco soy el más creativo a la hora de crear objetos, y parecía que la nueva mano misteriosa de Link iba a poner mis dos debilidades en primer plano en la secuela.
Desde fuera, no pude evitar admirar la creatividad y el ingenio de la comunidad de Tears of the Kingdom tras el lanzamiento del juego. Desde la construcción de vehículos impresionantes hasta la creación de formas ingeniosas de derrotar a los enemigos, Reddit se inundó de ejemplos impresionantes de cómo se podían utilizar las nuevas habilidades Ultrahand y Fuse. Incluso ahora, seguimos viendo creaciones increíbles de los jugadores, pero yo no me atrevía a probarlas.
Pero cuando recibí Tears of the Kingdom por mi cumpleaños, pensé que ya era hora de dejar a un lado mis temores y probarlo por fin. Y déjenme decirles que, tras un puñado de horas, nunca me había alegrado tanto de estar tan equivocado. Las mismas características que me echaron para atrás en la secuela han resultado ser las mecánicas más satisfactorias y gratificantes del juego.
Echar una mano
(Crédito de la imagen: Nintendo)
No digo que sea tan ingenioso como algunos de los jugadores de la comunidad de Tears of the Kingdom. Pero, como he llegado a descubrir, eso apenas importa cuando las habilidades Fuse y Ultrahand me hacen sentir constantemente como un genio creativo haciendo las cosas más básicas. No sólo demuestra lo bien diseñadas que están las mecánicas, sino también lo eficaz que es la aventura a la hora de presentártelas y ofrecerte un terreno de juego para experimentar. De hecho, está tan bien hecho que, aunque yo sea históricamente malo resolviendo puzles o haciendo manualidades, nunca me siento como si estuviera en la piel de Link.
Armas que blandir
(Crédito de la imagen: Nintendo)
Las mejores armas, arcos y más de Zelda Tears of the Kingdom
A pesar de experimentar un grave caso de FOMO cuando Legend of Zelda Tears of the Kingdom salió a la venta el año pasado, me tomé mi tiempo para jugarlo. A pesar de lo mucho que disfruté con Breath of the Wild, no me atrevía a adentrarme en la nueva aventura de Link en Hyrule por una sencilla razón: creía que no se me daría bien. No soy el mejor a la hora de resolver puzles, sobre todo cuando dichos puzles requieren que construya cosas. Tampoco soy el más creativo a la hora de crear objetos, y parecía que la nueva mano misteriosa de Link iba a poner mis dos debilidades en primer plano en la secuela.
Desde fuera, no pude evitar admirar la creatividad y el ingenio de la comunidad de Tears of the Kingdom tras el lanzamiento del juego. Desde la construcción de vehículos impresionantes hasta la creación de formas ingeniosas de derrotar a los enemigos, Reddit se inundó de ejemplos impresionantes de cómo se podían utilizar las nuevas habilidades Ultrahand y Fuse. Incluso ahora, seguimos viendo creaciones increíbles de los jugadores, pero yo no me atrevía a probarlas.
Pero cuando recibí Tears of the Kingdom por mi cumpleaños, pensé que ya era hora de dejar a un lado mis temores y probarlo por fin. Y déjenme decirles que, tras un puñado de horas, nunca me había alegrado tanto de estar tan equivocado. Las mismas características que me echaron para atrás en la secuela han resultado ser las mecánicas más satisfactorias y gratificantes del juego.
Echar una mano
(Crédito de la imagen: Nintendo)
No digo que sea tan ingenioso como algunos de los jugadores de la comunidad de Tears of the Kingdom. Pero, como he llegado a descubrir, eso apenas importa cuando las habilidades Fuse y Ultrahand me hacen sentir constantemente como un genio creativo haciendo las cosas más básicas. No sólo demuestra lo bien diseñadas que están las mecánicas, sino también lo eficaz que es la aventura a la hora de presentártelas y ofrecerte un terreno de juego para experimentar. De hecho, está tan bien hecho que, aunque yo sea históricamente malo resolviendo puzles o haciendo manualidades, nunca me siento como si estuviera en la piel de Link.
Armas que blandir
(Crédito de la imagen: Nintendo)
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