Mientras corro por un exuberante paisaje verde en Neva, me detienen unos brazos negros, enjutos, como ramitas, con manos puntiagudas que surgen de repente de la tierra. Como la protagonista, Alba, los ataco con mi espada mientras intentan arañarme, despejando el camino para mi fiel compañera loba blanca (y homónima del juego), Neva, que sigue corriendo. Una vez que los brazos putrefactos se han ido, sigo a mi amigo de cuatro patas, pero mi corazón se desploma cuando veo que el cachorro ha sido atrapado por más de esos extraños brazos, esforzándose por liberarse de sus garras. Me invade una sensación de urgencia y corto frenéticamente todo lo que se interpone en mi camino.
Ya libre, Neva aterriza a salvo de nuevo en el suelo, pero es evidente que la experiencia la ha conmocionado y se acobarda. Sin dudarlo ni un momento, corro a abrazar a la loba para asegurarle que puede continuar. En este punto, aún es muy pronto en la aventura, pero ya me preocupo mucho por mi pequeña compañera loba, lo que dice mucho de la eficacia con la que el desarrollador Nomada Studio te mete en el viaje de este dúo y en su vínculo cada vez mayor.
Neva es, sin duda, uno de los juegos más bonitos que he jugado este año, no sólo desde el punto de vista visual, sino también por la historia que cuenta.
Estaciones cambiantes
(Crédito de la imagen: Devolver Digital)
La aventura de acción en 2D se desarrolla a lo largo de las estaciones cambiantes, empezando en primavera, cuando el lobo es sólo un cachorro. A medida que pasa el tiempo, Neva crece no sólo en tamaño, sino también en habilidad, lo que te da nuevas formas de luchar contra los enemigos y navegar por los paisajes con elementos de plataformas. Aunque al principio Neva depende más de ti, el joven cachorro puede llegar a distraerse con el entorno, lo que significa que tienes que llamarlo continuamente para que vuelva a tu lado. Pero a medida que avanzan las estaciones y el cachorro se convierte en un lobo grande y majestuoso, Alba aprende nuevas formas de dirigirlos -como usar el gatillo del mando de PS5 para hacerlos volar por la pantalla y hincarle el diente a un enemigo- y Neva empezará a ayudarte más por voluntad propia.
Indie destacado
(Crédito de la imagen: Future Friends Games)
Europa parecía Zelda: Tears of the Kingdom reimaginado en un impresionante mundo de Studio Ghibli, y me encantó cada segundo.
Mientras corro por un exuberante paisaje verde en Neva, me detienen unos brazos negros, enjutos, como ramitas, con manos puntiagudas que surgen de repente de la tierra. Como la protagonista, Alba, los ataco con mi espada mientras intentan arañarme, despejando el camino para mi fiel compañera loba blanca (y homónima del juego), Neva, que sigue corriendo. Una vez que los brazos putrefactos se han ido, sigo a mi amigo de cuatro patas, pero mi corazón se desploma cuando veo que el cachorro ha sido atrapado por más de esos extraños brazos, esforzándose por liberarse de sus garras. Me invade una sensación de urgencia y corto frenéticamente todo lo que se interpone en mi camino.
Ya libre, Neva aterriza a salvo de nuevo en el suelo, pero es evidente que la experiencia la ha conmocionado y se acobarda. Sin dudarlo ni un momento, corro a abrazar a la loba para asegurarle que puede continuar. En este punto, aún es muy pronto en la aventura, pero ya me preocupo mucho por mi pequeña compañera loba, lo que dice mucho de la eficacia con la que el desarrollador Nomada Studio te mete en el viaje de este dúo y en su vínculo cada vez mayor.
Neva es, sin duda, uno de los juegos más bonitos que he jugado este año, no sólo desde el punto de vista visual, sino también por la historia que cuenta.
Estaciones cambiantes
(Crédito de la imagen: Devolver Digital)
La aventura de acción en 2D se desarrolla a lo largo de las estaciones cambiantes, empezando en primavera, cuando el lobo es sólo un cachorro. A medida que pasa el tiempo, Neva crece no sólo en tamaño, sino también en habilidad, lo que te da nuevas formas de luchar contra los enemigos y navegar por los paisajes con elementos de plataformas. Aunque al principio Neva depende más de ti, el joven cachorro puede llegar a distraerse con el entorno, lo que significa que tienes que llamarlo continuamente para que vuelva a tu lado. Pero a medida que avanzan las estaciones y el cachorro se convierte en un lobo grande y majestuoso, Alba aprende nuevas formas de dirigirlos -como usar el gatillo del mando de PS5 para hacerlos volar por la pantalla y hincarle el diente a un enemigo- y Neva empezará a ayudarte más por voluntad propia.
Indie destacado
(Crédito de la imagen: Future Friends Games)
Europa parecía Zelda: Tears of the Kingdom reimaginado en un impresionante mundo de Studio Ghibli, y me encantó cada segundo.