Marvel vs. Capcom 2 lleva mucho tiempo atrapado en una prisión de licencias especialmente cruel. Pero mientras que títulos clásicos como OutRun 2 se han enfrentado a destinos similares debido a la expiración de los derechos de licencia, Marvel vs. Capcom ha permanecido en un tipo diferente de purgatorio. No sé si os habéis dado cuenta, pero Marvel ha cambiado mucho en las dos últimas décadas. Ha pasado de ser una compañía de cómics casi en bancarrota, feliz de que algún desarrollador de videojuegos le prestara atención (y dinero) para hacer un juego de lucha con sus personajes, a una de -si no la mayor marca de entretenimiento del planeta, propiedad de Disney, nada menos.
La dinámica de poder en la relación entre Marvel y Capcom ha cambiado enormemente, de una forma que afectó negativamente al lanzamiento de Marvel vs. Capcom: Infinite y agrió las cosas entre las dos compañías. Además, cabe imaginar que el coste de obtener la licencia de estos personajes de Marvel sería exponencialmente más alto ahora, casi con toda seguridad demasiado alto para justificar el coste de reeditar un juego de lucha de hace un cuarto de siglo (¡ay!).
Sin embargo, parece que vivimos en uno de cada 14.000.605 universos en los que ganan los buenos, porque Marvel y Capcom han conseguido juntar todos los juegos de Capcom con licencia Marvel. Todos han sido reeditados en Marvel vs. Capcom Fighting Collection: Arcade Classics, un paquete supercompleto -sí, incluso el clásico beat ‘em up de desplazamiento The Punisher está incluido- listo para que toda una nueva generación descubra lo que los hace tan especiales. Estos juegos de lucha son algo más que otra fantástica parte de la historia de los videojuegos que se archiva. Forman parte del rico tapiz que constituye la historia de la comunidad de los juegos de lucha. Para demostrarlo, basta con echar un vistazo a la repercusión de Marvel vs. Capcom 2.
Reversión
(Crédito de la imagen: Capcom)Celebración del crossover
(Crédito de la imagen: Marvel Comics)
Marvel celebra el esperado relanzamiento de Marvel Vs. Capcom 2 poniendo su icónico arte en portadas variantes de Iron Man, los Vengadores, los X-Men, Spider-Man y muchos más.
Marvel vs. Capcom 2 lleva mucho tiempo atrapado en una prisión de licencias especialmente cruel. Pero mientras que títulos clásicos como OutRun 2 se han enfrentado a destinos similares debido a la expiración de los derechos de licencia, Marvel vs. Capcom ha permanecido en un tipo diferente de purgatorio. No sé si os habéis dado cuenta, pero Marvel ha cambiado mucho en las dos últimas décadas. Ha pasado de ser una compañía de cómics casi en bancarrota, feliz de que algún desarrollador de videojuegos le prestara atención (y dinero) para hacer un juego de lucha con sus personajes, a una de -si no la mayor marca de entretenimiento del planeta, propiedad de Disney, nada menos.
La dinámica de poder en la relación entre Marvel y Capcom ha cambiado enormemente, de una forma que afectó negativamente al lanzamiento de Marvel vs. Capcom: Infinite y agrió las cosas entre las dos compañías. Además, cabe imaginar que el coste de obtener la licencia de estos personajes de Marvel sería exponencialmente más alto ahora, casi con toda seguridad demasiado alto para justificar el coste de reeditar un juego de lucha de hace un cuarto de siglo (¡ay!).
Sin embargo, parece que vivimos en uno de cada 14.000.605 universos en los que ganan los buenos, porque Marvel y Capcom han conseguido juntar todos los juegos de Capcom con licencia Marvel. Todos han sido reeditados en Marvel vs. Capcom Fighting Collection: Arcade Classics, un paquete supercompleto -sí, incluso el clásico beat ‘em up de desplazamiento The Punisher está incluido- listo para que toda una nueva generación descubra lo que los hace tan especiales. Estos juegos de lucha son algo más que otra fantástica parte de la historia de los videojuegos que se archiva. Forman parte del rico tapiz que constituye la historia de la comunidad de los juegos de lucha. Para demostrarlo, basta con echar un vistazo a la repercusión de Marvel vs. Capcom 2.
Reversión
(Crédito de la imagen: Capcom)Celebración del crossover
(Crédito de la imagen: Marvel Comics)
Marvel celebra el esperado relanzamiento de Marvel Vs. Capcom 2 poniendo su icónico arte en portadas variantes de Iron Man, los Vengadores, los X-Men, Spider-Man y muchos más.
Desde el Chinatown Fair Family Fun Center de Nueva York hasta el mayor escenario de Evo, celebrado en el Strip de Las Vegas, Marvel vs. Capcom 2 ha mantenido durante mucho tiempo la reputación de ser el juego de lucha que más expectación ha levantado para jugar y ver. Para los no iniciados, Marvel vs. Capcom 2 es el caos -nada más que luces y sonidos intermitentes-, pero para los entendidos, para los que se han sumergido en sus peligrosas aguas, es una serie de interminables intentos de los jugadores por mezclarse entre sí o convertir un solo golpe perdido en un combo muy dañino. Siempre hay mucho riesgo y mucha recompensa en un juego que exige al jugador no sólo una gran habilidad de ejecución, sino un profundo conocimiento de muchísimas situaciones. Es un juego que pone a prueba tanto la fortaleza mental como las reacciones, y es tan emocionante verlo como jugarlo.
Lo que significa que tiene una larga historia competitiva. Desde Battle At The Bay 4 en 2000, Marvel vs. Capcom 2 fue el primer juego no perteneciente a Street Fighter que se celebró en el evento que acabaría convirtiéndose en Evo. Al año siguiente, en la última Battle At The Bay antes de que se convirtiera en Evolution Fighting Championship, un joven Justin Wong -que entonces sólo tenía 15 años- se hizo con el primer puesto, el primero de sus muchos primeros puestos en Marvel vs. Capcom 2. De los nueve años que el juego se celebró en Evo, Wong ganó seis de ellos, consolidando su lugar como uno de los mejores jugadores de la historia del juego. Ahora que Evo organiza un torneo de juegos clásicos, Marvel vs. Capcom 2 parece una apuesta bastante sólida para regresar al evento del año que viene.
Sin embargo, al igual que muchos juegos de lucha antiguos, Marvel vs. Capcom 2 no estaba pensado para jugar a un nivel tan absurdamente alto. Jugadores como el ya mencionado Justin Wong, Sanford Kelly, Yipes, Clockw0rk y muchos otros que sin duda no he mencionado lideraron la carga, pero toda una comunidad de jugadores con ideas afines destrozaron el juego sin prisa pero sin pausa para descubrir qué personajes son objetivamente los mejores. También desenterraron toda una serie de fallos y exploits que, aunque no rompen el juego (excepto uno, el glitch Ruby Heart, que puede y hará que te expulsen de los salones recreativos), pueden dar a los jugadores una ventaja significativa sobre un oponente que no los conozca. Hoy en día, se eliminarían con parches o se reequilibraría la plantilla, en un intento de hacer el juego mucho más justo, pero ese no es el estilo de Marvel. Marvel vs. Capcom 2 está grabado en piedra en este momento. Es lo que es. Adaptarse o morir.