Acabo de encontrar una prueba en Alan Wake 2, y no podría estar más emocionado. Nada me hace sentir como un auténtico detective como el Lugar de la Mente en el survival horror de Remedy, y es con diferencia mi característica favorita del juego. Claro que a veces puede cogerte un poco de la mano y entorpecerte a la hora de descubrir el siguiente paso a dar de forma orgánica, pero me encanta cómo relata los acontecimientos de la historia.
En cierto modo, es como el registro de misiones más creativo y temáticamente apropiado que continuamente me hace sentir que estoy impulsando activamente la historia con cada nuevo descubrimiento. Y no sólo eso, sino que también influye en uno de los aspectos mejor ejecutados de Alan Wake 2: el cambio entre personajes. Con protagonistas duales, tanto Saga como Wake tienen sus propios tableros respectivos que funcionan de formas distintas para complementar sus perspectivas. En lugar de un tablero de casos, Wake tiene un tablero de tramas, que encaja perfectamente dado que su versión del Lugar de la Mente adopta la forma de la Sala del Escritor. No puedo dejar de obsesionarme con el Lugar de la Mente y el equivalente de Wake, desde la forma en que los tableros de casos reúnen objetos coleccionables, pistas e hilos narrativos, hasta los detalles más pequeños que empiezan a reflejar las experiencias de Saga.
Toques personales
(Crédito de la imagen: Remedy)
Cuanto más tiempo paso ahondando en el misterio que rodea a Saga y Wake, más aprecio el tablero de casos de Alan Wake 2. Cada vez que se añade una nueva prueba al expediente de un caso, no sólo estás desentrañando más cosas sobre los extraños sucesos en los que te estás viendo envuelto, sino que también estás aprendiendo más sobre Saga y su conexión con los acontecimientos a medida que se desarrollan. Me encanta cómo, por ejemplo, puedes pasar el ratón por encima de las pistas fijadas en el tablero y ver notas escritas por Saga que te dan una idea de lo que piensa sobre una prueba o un hilo de la historia en particular. Puesto que el Lugar de la Mente, como su nombre delata, se encuentra dentro de la mente de Saga, tiene sentido que le acerque a ella como personaje. Es un espacio para que se desarrollen sus pensamientos y deducciones más íntimos, lo que te permite comprender mejor cómo se siente a cada paso.
Taza del horror
(Crédito de la imagen: Remedy)
Había una localización de Alan Wake 2 que me moría de ganas de visitar, pero resultó ser puro combustible para pesadillas.
Y ese es el punto crucial. El Lugar de la Mente actúa como vehículo no sólo para seguir haciendo avanzar la historia, sino también como medio para sumergirte realmente en los acontecimientos que se desarrollan desde la perspectiva de Saga. Al fin y al cabo, se trata de un lugar que es personal y único para ella, y a medida que empiezas a conocerla mejor como personaje, empiezan a aparecer más detalles en el Lugar de la Mente, como una fotografía de su hija. Como agente del FBI, también tiene mucho sentido que su proceso de pensamiento refleje el trabajo que tiene en el mundo, y desde luego me hace sentir como si estuviera directamente en su lugar, jugando al rol de detective que intenta dar sentido a las pistas.
Además de reunir todas las pruebas, el tablón del caso también archiva todos los objetos coleccionables que ha encontrado por el camino, y la localización le permite volver a ver o escuchar canciones y anuncios. Desde un punto de vista práctico, aprecio mucho la forma en que puedo repasar todo lo que ha ocurrido hasta el momento, con cada personaje, acontecimiento y descubrimiento destacable expuesto en un tablero para que pueda reflexionar sobre ello. Además, con los objetos coleccionables que hay que encontrar -desde escondites de culto hasta canciones infantiles y fiambreras-, también es útil para llevar la cuenta de lo que he encontrado en cada lugar en el que he estado, e incluso me da una vaga idea de cuántos me quedan por descubrir.
Cambiar realidades
(Crédito de la imagen: Remedy)
Por otro lado, cuando cambias a Alan Wake, te retiras a la Sala del Escritor en lugar de al Lugar de la Mente. Allí, también haces uso de un tablero que encaja perfectamente con lo que él es como personaje. En lugar de ser un tablero de casos, Wake utiliza un tablero de tramas y cada lugar actúa como si fuera una escena de una de sus novelas. Cuando se está explorando el Lugar Oscuro, se pueden encontrar puntos de la trama que se pueden anotar en el tablero para que Wake los escriba en la realidad. Esencialmente, es capaz de manipular y cambiar áreas del mundo del juego a través de la Sala del Escritor. Aunque su uso no resulta tan satisfactorio como el de los archivos de casos del Lugar de la Mente, aprecio que funcione de forma diferente para reflejar la profesión de Wake, al igual que en Saga.
Sin embargo, la configuración del tablero tiene algunos inconvenientes. Ha habido algunas ocasiones, por ejemplo, en las que me he adelantado a las pruebas y las he resuelto por mí mismo, pero el Lugar de la Mente me impide avanzar hasta que lo he concretado todo. A veces, Saga incluso reconocerá que ya hemos resuelto algo, y las pruebas irán automáticamente al lugar correcto del tablero. Estar constantemente encontrando pistas puede ralentizar a veces el ritmo de la experiencia.
(Crédito de la imagen: Remedy)
Mientras intentas encontrar el camino a seguir, Saga también puede señalarte el tablero o sugerirte que hagas un perfil de un personaje en el Lugar de la Mente, lo que te quita parte de la alegría de llegar a esa conclusión por ti mismo. Aunque le dirige un poco más de lo que realmente necesita, es increíblemente satisfactorio recopilar todas las pistas en un solo lugar, y en lo que respecta a las características, sus aspectos positivos superan con creces a los negativos.
La forma en que cada tablero tiene un uso diferente diferencia mecánicamente la experiencia de jugar como uno u otro personaje, y me encanta la eficacia con la que ambas áreas encajan temáticamente con Wake y Saga. Tanto el Lugar de la Mente como la Sala del Escritor dan la sensación de estar adaptados al papel que se está interpretando al cambiar de una realidad a otra. Con Alan intentando reescribir la historia y Saga tratando de darle sentido, los tableros también ayudan a distinguir los objetivos de cada personaje y dan a cada lado su propia sensación distintiva. Es a la vez una forma creativa y acertada de progresar, y un medio eficaz de hacer que ambos protagonistas sientan que dirigen su propia historia, aunque estén intrínsecamente unidos.
A través de todo esto, nunca me canso de la forma en que me hace sentir como un detective, y es muy gratificante ver todo lo que he descubierto expuesto ante mí. Y en lo que respecta a las formas de seguir la historia y los coleccionables del catálogo, está muy por encima de muchos otros juegos a los que he jugado.
He convertido Alan Wake 2 en un RPG detectivesco de papel y lápiz y me lo estoy pasando como nunca.