Stoic se merece todo el éxito que le ha llegado. Formado por tres antiguos alumnos de BioWare, el estudio construyó su reputación a lomos de The Banner Saga, una trilogía de fenomenales RPG tácticos que fueron financiados por los aficionados y amados por muchos. Ahora, Stoic colabora con Xbox Game Studios para Towerborne, una nueva aventura de acción cooperativa diseñada para evolucionar gradualmente, que ofrece una impresionante mezcla de la carnicería de Castle Crashers con una libertad propia de Monster Hunter.
La calidad tan inherente a los juegos de Stoic se hace evidente desde el momento en que empiezo a jugar a Towerborne. La vibrante paleta de colores y los distintivos diseños de los personajes atraen rápidamente la mirada, mientras cuatro avatares impecablemente ataviados luchan contra amplios fondos de acuarela. Su aspecto es impresionante, y sin duda será uno de los juegos más atractivos de la próxima serie X de Xbox que se lanzará en 2024. Me refiero a la fuerza de la estética visual, pero también a su núcleo de juego: es difícil no sentirse atraído por la estridente acción de Towerborne, mientras exagerados tajos y cuchilladas se estrellan contra oleadas de enemigos merodeadores.
Lucha con amigos
(Crédito de la imagen: Stoic)Gamescom 2023
(Crédito de la imagen: Gamescom)
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Hay algo que me encanta de Towerborne: no importa la combinación de botones que introduzca en el mando de la Xbox Serie X, parece que ocurre algo genial. Hay un pequeño movimiento impresionante en el que mi avatar conecta dos ataques ligeros contra un enemigo y luego cambia su peso mientras eleva el Warclub en el aire para el ataque pesado: una explosión conmocionadora que lanza a los monstruos a toda velocidad por la pantalla. Es una forma endiablada de concluir un combo, que recuerda al tipo de intrincados conjuntos de movimientos más inherentes a los juegos de lucha que a lo que es ostensiblemente un beat ‘em up arcade moderno.
Afortunadamente, Towerborne no es el tipo de experiencia que requiere un máster en lectura de i-frames para encontrar la diversión en el combate. Los encuentros son fluidos y sencillos, y el jugador puede crear estrategias en torno a su personaje y a lo que lleve equipado. Los personajes pueden blandir un garrote de guerra a dos manos o atarse una espada y un escudo, y cada arma recogida o fabricada ofrece algún tipo de cualidad diferencial a sus patrones de ataque o maniobrabilidad. La calidad de las expresivas animaciones fomenta fácilmente la experimentación.
Las armas se combinan inteligentemente con su Umbra, una especie de compañera que puede amplificar sus habilidades de combate y añadir nuevas capacidades a su arsenal. Pude invocar una energía espiritual que inflige daño a los enemigos cercanos, mientras que los otros tres jugadores que luchaban a mi lado en esta demo cooperativa tenían otras oportunidades: uno podía desatar un ataque punzante a distancia, y otro podía mantener a las criaturas en su sitio para permitir que el grupo convergiera para una ráfaga de golpes. Todo ello se combina para crear una experiencia de gran expresividad, un sistema de combate expansivo que resulta gratificante independientemente de su experiencia con el juego en sí o con el género más amplio en el que se encuadra Towerborne.
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«Cuando pienso en el aspecto social de Towerborne, está lo que existe en el propio juego: nuestros sistemas cooperativos y el enfoque de la narración. Pero también pensamos en la oportunidad que esperamos brindar a las familias para que jueguen juntas», afirma Boka Agboje, responsable social y de la comunidad en Stoic. «Creemos que se puede poner el mando en la mano de un niño de cuatro años o de una persona de 88 y ambos serían capaces de jugar. Hay una gran oportunidad en eso para que Towerborne tenga una verdadera longevidad social».
Creo que aquí es donde realmente se confirma la comparación con Castle Crashers. No es sólo que Towerborne comparta una estructura similar de desplazamiento lateral en 2D y una colorida paleta visual, sino también esta sensación más amplia de accesibilidad. Donde la nueva aventura de Stoic se distingue del legendario lanzamiento de The Behemoth para Xbox Live Arcade es en la profundidad que se oculta tras el caos. El enfoque del diseño de combos inspirado en los juegos de lucha, el expresivo armamento al estilo de Monster Hunter y este enorme enfoque en la narración social: hay personajes con los que entablar amistad en el Belfry y un mapa del mundo hexagonal en expansión a su alrededor para explorar con sus amigos que crecerá con el tiempo. Pasé 30 minutos con Towerborne, y podría haberme sentado allí fácilmente otras 30 horas.
Towerborne se lanzará en 2024 y saldrá a la venta en Xbox Series X, PC y Xbox Game Pass.